PARTE

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Soy persona poco dada a poner "partes de conducta" a los alumn@s, pero a veces es la única solución frente a ciertas actitudes en el aula. También por evitar el efecto contagio que producen esos "pocos" alumn@s en el grupo. Su único objetivo al venir a clase es causar molestias y dejar pasar el tiempo.

Si les comentas que suspenderán si no atienden, te mienten señalando que no estudian tu asignatura porque es muy difícil (igual que otras cinco, seis o siete que no nombran). Si les reflexionas sobre la importancia del estudio, te sueltan que no les interesa. Si les pides la agenda para informar a los padres, te dicen que les da igual, que sus padres ya conocen su apatía. Si les dices que les va a poner un parte, te sonríen cómo si no fuera con ellos.

En definitiva, son ese 22 %  del que nos hablan las frías estadísticas de "abandono escolar". Yo, personalmente, desde la primera evaluación ya puedo señalarlos. Son uno de cada cuatro. Y esta es una realidad que, con la crisis de valores, parece ir a más. ¡Pobres mentes ignorantes e inconscientes!
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