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Me envía una compañera de trabajo (Raquel) una carta muy interesante de otra compañera funcionaria granadina. Se la envía al locutor Carlos Herrera, quien muta -según ella- su labor de informador por la de deformador o propagador de 'tópicos'. Lo que me lleva a a esta reflexión: ciertamente sería bueno dejarnos de "generalizaciones" y "leyendas urbanas", así como ser más coherentes con la realidad y más sinceros con la crisis. Os dejo un enlace por si queréis leerla. Es muy buena: Carta a Carlos Herrera.
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